Por: Cristian Pulido J.T. 1001
La violencia escolar es actualmente uno de los problemas más comunes en las instituciones educativas. Algunos estudiantes han llegado incluso a matar, posiblemente debido a que ya no quieren ir al plantel a educarse ni a divertirse, sino por el contrario van a buscar peleas y pleitos por cualquier motivo.
Ya no son niños en su esencia, ahora tienen un comportamiento irracional, porque hasta son capaces de matar o herir por cosas insignificantes. A veces parece que este mundo ya no es para los niños, sino para la violencia.
En un lugar donde se supone, prevalecen los derechos del menor, pareciera más bien que la niñez está en vía de extinción porque los niños actualmente se están dejando manipular por los demás siguiendo pasos equivocados de personas que no han valorado la escuela.
Hay estudiantes que a veces se muestran ignorantes cuando se ofenden con facilidad y actúan como animales, pese a que éstos son menos violentos. No es verdad que el más violento o fuerte es el “duro” o “macho”.
El responder con puños y patadas da muestra todo lo contrario. No cabe duda que es más valiente y hombre, quién arregla sus conflictos con palabras
La violencia escolar es actualmente uno de los problemas más comunes en las instituciones educativas. Algunos estudiantes han llegado incluso a matar, posiblemente debido a que ya no quieren ir al plantel a educarse ni a divertirse, sino por el contrario van a buscar peleas y pleitos por cualquier motivo.
Ya no son niños en su esencia, ahora tienen un comportamiento irracional, porque hasta son capaces de matar o herir por cosas insignificantes. A veces parece que este mundo ya no es para los niños, sino para la violencia.
En un lugar donde se supone, prevalecen los derechos del menor, pareciera más bien que la niñez está en vía de extinción porque los niños actualmente se están dejando manipular por los demás siguiendo pasos equivocados de personas que no han valorado la escuela.
Hay estudiantes que a veces se muestran ignorantes cuando se ofenden con facilidad y actúan como animales, pese a que éstos son menos violentos. No es verdad que el más violento o fuerte es el “duro” o “macho”.
El responder con puños y patadas da muestra todo lo contrario. No cabe duda que es más valiente y hombre, quién arregla sus conflictos con palabras
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